DECLARACIÓN AL FINAL DE LA XLV ASAMBLEA EXTRAORDINARIA

1. Los obispos de Venezuela nos hemos reunido los días 15,16 y 17 de octubre de 2024 en la
45a Asamblea Plenaria Extraordinaria para orar y reflexionar sobre la realidad social,
política y eclesial del país. Nos han acompañado en nuestros trabajos sacerdotes, religiosas
y laicos representantes de diversas instituciones y áreas de servicio pastoral.

2. Ha resonado insistentemente en nuestra mente y corazón las palabras del Señor Jesucristo
“la verdad los hará libres” (Jn 8,31), por lo cual queremos reiterar el llamado al Consejo
Nacional Electoral (CNE), para que, conforme a lo establecido en la Constitución y las
leyes publique de forma detallada los resultados del proceso comicial realizado el pasado
28 de julio, en el que se evidenció la voluntad de cambio del pueblo venezolano. La
presentación de los resultados es un paso esencial para conservar la confianza de los
ciudadanos en el voto y recuperar el verdadero sentido de la política. Sólo así podremos
avanzar juntos hacia la construcción de una Venezuela democrática y en paz.

3. Rechazamos de manera categórica la represión de las manifestaciones, las detenciones
arbitrarias y las violaciones de los derechos humanos ocurridas después de las elecciones.
Exigimos la liberación de los detenidos, entre los cuales se encuentran menores de edad.

4. Al contemplar la difícil situación por la que atraviesa nuestro país, nos sentimos
interpelados por la palabra de Dios que nos invita a escuchar los clamores del pueblo y
consolarlo (cfr. Is 40,1). Renovamos nuestro compromiso con todos los hermanos que
sufren, de seguir acompañándolos a través de la oración, la acogida, la compañía, el
intercambio y el servicio que brindamos por medio de las diferentes instancias eclesiales;
reafirmamos nuestro compromiso de estar a su lado en estos momentos difíciles.
Manifestamos la disposición de la Iglesia a promover iniciativas que contribuyan a la
solución pacífica de las diferencias.

5. Invitamos a todos a avivar la esperanza: “Cristo es nuestra esperanza” (cfr. 1 Tim 1,1).
Mostramos nuestro apoyo a las iniciativas de oración que desde diversas instancias se
promueven para pedir por la paz y el bienestar de Venezuela.

Caracas, 17 de octubre de 2024

Los Obispos de Venezuela